SINCRONIZADA – Rusia, con seis oros y una plata, se marchó de Melbourne como superpotencia mundial

El equipo ruso de natación sincronizada se marchó del Mundial de Melbourne 2007 como primera superpotencia mundial con seis oros y una plata, por delante de España -mejor con cuatro platas y dos bronces- y Japón, ésta con menos platas. Natalia Ischenko, el dúo de ‘Anastasias’ Davydova y Ermakova, y el conjunto fueron un rodillo que sólo cedió ante el regreso triunfal de la campeona francesa Virginie Dedieu en solo libre.
Las rusas se lo llevaron casi todo. En solo técnico, la joven Natalia Ischenko pudo con la reina del Mundial, la española Gemma Mengual, y con la japonesa Saho Harada, no así en libre, donde la francesa Dedieu lució como nunca sus galones de veterana. Las que tampoco fallaron –con dos oros en dúo libre y técnico- fueron las sempiternas ‘Anastasias’ Davydova y Ermakova, que además ayudaron a su país a conseguir otro oro en la final de combo, con Japón, Estados Unidos y España detrás.

Finalmente, en equipo, las rusas -en la imagen- también doblaron en la primera plaza del podio en libre y técnico, con un conjunto formado por la solista Ischenko y sus compañeras Gromova, Khasyanova, Kuzhela, Nasekina, Ovtchinnikova, Romashina y Shorina. Imbatibles para las japonesas, que se llevaron dos platas y cuatro bronces, con su líder Saho Harada a la cabeza.

La otra medalla en cuestión de las 21 a repartir –aparte de las seis de España- fue para la delegación estadounidense con su equipo de combo, dejando fuera del podio el primer día a las españolas.